Hotel Voramar, Benidorm

El hotel tiene una ubicación excelente, justo en el borde del casco antiguo y cerca de la playa y varios restaurantes. Las habitaciones son bonitas, aunque tuve un problema con un olor a cigarrillo que afectó mi ropa. El servicio fue muy bueno, el personal fue amable y servicial. Sin embargo, el drenaje de la ducha no funcionaba bien y eso dejó un olor desagradable en la habitación. En general, es un buen lugar para hospedarse, pero hay aspectos que podrían mejorar.

Este hotel está en una ubicación fantástica, justo en el casco antiguo y a pasos de la playa. Las habitaciones son limpias, cómodas y tienen un baño espacioso, aunque pueden ser algo ruidosas. El personal es increíblemente amable y servicial, lo cual es un gran plus. Sin embargo, la terraza de la azotea no estaba abierta durante mi estancia en febrero. En general, ofrece una buena relación calidad-precio, pero podría mejorar un poco en el área de ruido.

El hotel tiene una ubicación fantástica, justo al borde del casco antiguo y casi en la playa, lo que facilita el acceso a tiendas y lugares de interés. Las habitaciones son espaciosas y cómodas, pero la experiencia gastronómica fue un poco decepcionante, ya que la comida estaba bien, pero no excepcional. El área de la piscina es relajante y bien cuidada. Aunque el precio es razonable, me pareció un poco molesto no poder abrir las ventanas para ventilar las habitaciones durante la noche.

El hotel tiene una ubicación fantástica, muy cerca de la playa y en el casco antiguo, lo que es un gran punto a su favor. Las habitaciones son muy básicas y no reflejan el estilo del área de recepción, además tenían un olor a cigarrillo bastante desagradable. El servicio fue muy amable, especialmente Mirabela en recepción, que se esforzó mucho para ayudarme durante mi estancia. A pesar de las deficiencias, el precio es razonable, evitando que la experiencia sea completamente negativa.

El hotel está situado en una ubicación increíble, justo al lado del casco antiguo y cerca de la playa y las tiendas. Las habitaciones eran agradables y limpias, además del personal muy amable. Sin embargo, la experiencia de comedor podría mejorarse ya que las opciones de desayuno eran limitadas. Aproveché el hermoso área de la terraza, aunque me hubiera gustado que estuviera abierta ya que era febrero. En general, el precio es razonable, pero es un poco molesto que no haya Wi-Fi incluido en la tarifa.